Cómo beneficiarse de la “terapia de naturaleza” en tiempos de confinamiento.
Comentamos en posteos anteriores sobre el efecto Biofilia, los beneficios de estar en la naturaleza. Ahora bien, como podemos beneficiarnos de ello en este tiempo en el cual no todos podemos hacernos una "escapada" a algún ambiente natural.
Roger Ulrich, profesor de arquitectura y ciencias de la salud en la Universidad Técnica Chalmers, en Suecia, ha demostrado que el mero hecho de mirar el verde de los árboles a través de la ventana de un hospital acelera la recuperación tras una operación.
Sus estudios cumplen con todos los requisitos científicos y han demostrado que con la ayuda de un poco de verde se necesitan menos analgésicos y disminuye el riesgo de complicaciones posoperatorias.
El profesor Ulrich demostraba asimismo que hasta los documentales y las fotografías de la naturaleza ejercen un efecto beneficioso sobre los enfermos y alivian el dolor.
Kaveli Korpela, profesor de la Universidad de Tampere, en Finlandia, quería descubrir cuán rápido operaba sobre nuestros cerebros emocionales, la Naturaleza. Si la teoría psicoevolutiva de Roger Urlich es correcta, entonces nuestras respuestas ante puntos placenteros de naturaleza deberían ser automáticas, y acaso inmediatas.
Korpela preparó un grupo de voluntarios mostrándoles velozmente fotografías de varias escenas que habían sido manipuladas según un espectro que iba de lo urbano a edificios y árboles hasta solo árboles o aparques sin estructuras. Después de cada foto, se les pidió a los voluntarios que identificaran las emociones en las imágenes de caras que el les mostraba. Lo interesante es que después de ver escenas con mas naturaleza, los voluntarios reconocían más rápido la felicidad y más despacio las emociones negativas como ira o miedo. Y el caso inverso al mostrar tomas más urbanas. En otras palabras el mirar fotos de la naturaleza los hacía comportarse (instantáneamente) de manera más feliz. Para Korpela, el estudio confirmaba la hipótesis de Urlich acerca de la naturaleza causa respuesta emocional rápida en un nivel inconsciente.
La Naturalea tiene alguno efectos inmediatos: Pulso más bajo y el comienzo de una respuesta del sistema nervioso parasimpático que lleva a sensaciones de paz y bienestar. En el lapso de 200 milisegundos, la gente reacciona positivamente cuando ve imágenes de naturaleza. La foto que uno ve, afecta la forma en que responde, porque la foto evoca las propias emociones. Otros experimentos de Urlich con los videos sangrientos en la maderera seguidos de videos de naturaleza mostraban un descenso en los registros cardíacos de los voluntarios, en la tensión muscular facial y cambios en la conductancia de la piel, todos ocurrían en general en el lapso de cuatro a siete minutos.
Por otro lado, algunos estudios muestran un descenso de los niveles de hemoglobina (un indicador de la sangre y el oxígeno) en e córtex prefrontal durante el tiempo pasado en la naturaleza. Todavía se debate donde va la sangre en su lugar. Al menos un estudio de resonancia magnética (usando fotografías de la naturaleza) muestra que se dirige a partes del cerebro como la ínsula o el cíngulo anterior, asociados con el placer, la empatía y el pensamiento sin restricciones. Por el contrario cuando esos mismos sujetos miraban fotos urbanas, más sangre se trasladaba hacia la amígdala, que registra el miedo y la ansiedad.
Entonces, mientras tengamos que seguir #quedandonosencasa, saca provecho de los libros y documentales de naturaleza que tengas a mano!, que si bien no es exactamente lo mismo que estar en la naturaleza, tu cerebro y tus sistemas, sin dudas van a recibir efectos positivos!